Esperas a lo largo de la mañana, la palabra clave. El momento mágico de, siento por ti lo que sientes por mi.
¿Qué hacer para no pensar en la persona que le daba importancia a tu vida? La persona con la que querías pasar largas horas en la cama, mientras acariciabas mi espalda desnuda con tus suaves manos, la persona con la cual más tiempo querías estar, con la que querías convertir noches enteras en musicales a la orilla de la cama y que... con un nudo en el estómago lo escribo: ahora ya no está.
Una vez dije siempre, y una vez dije que jamás lloraría, no enfrente de ti, no para demostrarte lo débil y vulnerable que puedo llegar a ser y todas perdieron importancia y perdieron valor.
Iba a buscarte, daba cualquier cosa, como si estuvieras peleando con un ser malvado que tenía mi corazón cogido de una parte y yo, inocente de mi, quería ganar esa lucha y devolverme lo que es mío, mi vida.
Esto no debía acabar así, ni yo debía romperme, ni tu debías sentirte mal y sobretodo esto no debía desaparecer de la historia.
Romper en pedazos un amor, en 2 segundos, llorar, nervios y sufrimiento, la luz se apaga, y no está, no hay nada, simplemente desaparece, se rompe en trozos de cristal muy pequeños.
Odio cada momento de frenesí, de impotencia y rabia, de que mi mente me diga una y otra vez, moriste y nada a partir de ahora se comparará con el acompañamiento de una vida con la persona que quieres y te quiere.
Antes de todo, estabas tú, tú nombre sonaba cada día al menos 5 veces.
Nunca pensé que dejaría de leer tus buenos días y tus buenas noches, nunca pensé que me serian de vital importancia.
Desde hace mucho tiempo, realmente supe que era el indicada, la última, hoy por primera vez, no estoy segura.
Rápidamente no dudo en buscarte en dar todo lo que tengo en mis manos, nunca dudo en ir a ver si esto es cierto, que la distancia es 0.
Estaba seguro que el amor era muy puro, más fuerte que ninguna otra cosa, hoy por hoy se que si era muy dulce y agrio, muy sano en sentimiento, no va a desaparecer en 96 horas.
Es el sentimiento más doloroso, el más inestable. Pero no todo es malo, es el único sentimiento que te hace olvidar en muy pocos segundos y te hace derretirte ante esa persona cuyo sentimiento es mutuo.
Alejarte de quien quieres no siempre es la mejor opción, pero a veces si.