No tuve tiempo de
escribir algún post cumpleañero, la pasé genial: estuve con el amor de mi vida
todo el día de mi cumple como diría una chica de 20 años enamorada y un día antes sushi (eso es lo mejor de todo), recibí mensajes, llamadas (incluyendo mis papitos), mensajes de correo,
mensajes en mi muro de facebook. sumamente agradecida por tanto cariño, Dios
es generoso conmigo, no me puedo quejar, la gente que me tiene alguna
consideración, estima o cariño me hizo llegar más de una línea de su precioso
tiempo en su teclado.
Tuve dos pasteles de cumpleaños y cuando sople las velitas en los dos deseos te pedí de deseo ♡ tengo fe, en que pronto se cumplirán. Como diría una chica de 20 años enamorada.
La vida es así: no podemos retener todo y fingir que las cosas están
bien cuando no lo están; uno no puede NI DEBE FINGIR, uno debe ser transparente
con sus sentimientos, pensamientos y creencias;y lo que no encaja pues bueno...
He aprendido que no todas las familias son como la mía, y no lo digo
porque la mía sea la mejor, lo digo porque a pesar de nuestros errores, de
nuestros problemas, de nuestras diferencias; siempre lo intentamos, siempre
intentamos seguir juntos, unidos, pegados... y eso se hace con la familia:
siempre se sigue perdonando e intentando, esto es lo que creo yo, y seguiré
fiel a mi creencia.
He aprendido que el amor, la querencia, los lazos no se fuerzan...
duele, duele mucho dejar ir, que no exista o no se comprenda el concepto de
familia, de amor, de querencia, de lazos que tengo... por lo tanto: dejar ir...
aún duele porque no se puede arrancar como curita, así de rápido... he llorado
y sigo llorando, pero ya pasará.
He aprendido y corroborado que uno propone y planifica pero Dios
dispone, y sus tiempos, aunque joda, no son los nuestros...¡caballero nomás!
Llevo cuatro fracasos en un plan y lo llevo como puedo... no fue fácil al
principio, no es fácil todavía.... pero ahí vamos... nada gano con reproches,
con deprimirme más, con fastidiar mi relación, que es mi único
consuelo... ando autoanimándome, autoterapiándome, autotodo... y es lo mejor
que puedo hacer por mí. Y sí, agradezco a Dios, tener una madre como mi madre
que cuando llevo días sin hablar con ella, desde tu adiós.
No me gusta sentirme sola, no lo busco, no lo quiero y, simplemente, no
lo estoy... Se siente muy bien, saber que si algún día me voy, habrá gente que
sienta mi ausencia, habrá a quienes les haré falta, dejaré algún vacío... por
un rato, pero es suficiente.
Gracias ♡♡♡